Las manijas de Venecia

Foto: lonelyplanet

En el pasado se le conoció como la República Serenísima. Sus visitantes quedan hechizados por sus canales, callejones y obras de grandes maestros venecianos de la pintura: Tintoretto, Tiziano y Canaletto, por mencionar algunos.

Además de las bellas fachadas de sus casas, que han perdurado con el paso del tiempo, están sus típicos ventanales con puertas de madera y sus detalladas manijas que poca atención se les presta en una visita a Venecia, las cuales se forjaron artísticamente encerrado misterios e historias. 

Historia del hierro forjado 

Foto: Ada Lorena

Trabajar la herrería en la Serenísima significaba embellecer la ciudad, la labor consistía en labrar en caliente el metal forjándolo de manera plástica permitiendo realizar obras maestras.

Los herreros de Venecia eran nombrados maestros por los trabajos artísticos que realizaban, poco a poco fueron desapareciendo por falta de encargos y de trabajadores especializados.

En el siglo XI fueron obligados a prestar sus servicios gratuitamente para el gobierno del Palacio Ducal, desarrollando la economía de la isla, forjando espadas, ventanas, gárgolas y balcones, entre otros objetos. 

Ante la demanda de objetos de hierro forjado, Venecia creó el gremio de los Favari, ya que en un pueblo del Véneto italiano Feltre, los herreros estuvieron forjando herramientas de guerra y utensilios de gran calidad a precios más bajos que los venecianos debido a la gran cantidad de carbón que se encontraba a sus alrededores. Tras la caída de la República Veneciana se dedicaron a realizar exclusivamente piezas decorativas.

Las piezas del Diablo

Muchas de las manijas encontradas en las puertas de Venecia tienen caras grotescas, elaboradas quizás para crear miedo en la población y llevarlos por el buen camino.

Figura de conejo que asemeja la cara de un hombre. La boca abierta como si estuviese gritando, evocando los sonidos del demonio. Las largas orejas enfatizan la naturaleza carnal del Diablo. Foto: Ada Lorena

La personificación de Satanás “el mal”, conocido como Zoroastrian Angra Manyu, el Belial Hebreo, y el Anticristo en el Nuevo Testamento, fue un tema dominante en el arte religioso. 

Pero, ¿cuáles fueron las intenciones del dueño de la casa en poner una manija con una cara grotesca? Algunos de los monstros representados en pinturas o esculturas hacen alusión a las ideas de autores clásicos, incluidos Homero, el historiador griego Herodotus y el Romano Plinio “El Viejo”.

Es la representación simbólica del evangelista San Marcos. La serpiente en el cristianismo por lo general representa al diablo, aunque también a la sabiduría.  Foto: Ada Lorena

Los artistas de monstruos, opuesto a los artistas que esculpían figuras celestiales, tenían mayor libertad a la creatividad con las figuras caóticas de sus personajes. 

PARA SABER…

-Venecia tuvo sus orígenes en ambientes inhóspitos y desfavorables por sus características geografías de edificarse en un archipiélago con aguas lodosas, a pesar de ello, sus primeros pobladores hicieron frente a las adversidades de manera tan admirable que se llegó a convertir en una república con el mayor potencia mercantil de su época; además, erigieron para la humanidad una de las ciudades más bellas de todos los tiempos, hoy en día declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. 

-El hierro forjado se obtiene a partir del mineral de hierro calentado a altas temperaturas en una forja, después se procedía a golpearlo, en un proceso en el que se buscaba eliminar impurezas contenidas en el mineral.

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